Una discusión que comenzó en el mediodía de este martes desató una amenaza de muerte.

Horas después, a las 7 de la noche, en la calle 10 entre carreras 43 y 44 en el sector de Barranquillita,  los amenazados al mediodía, un hombre y su nuera,,fueron asesinados.

Allí, dos sicarios asesinaron a tiros a Manuel Márquez Torres, de 43 años, y Estefany Julieth Herrera Rúa, de 20 años.

Según lo relatado por sus familiares, la mujer de un hombre conocido en el sector como ‘Chucky’ peleó con Estefany en el mediodía de ayer martes diciéndole que la iba a matar. "Horas después lo cumplió: la mató a ella y al suegro", dijeron.

"Ellos como que le tenían envidia. Siempre peleaban por cualquier cosa. Ayer la amenazó, y como dice el dicho amenaza dicha, amenaza cumplida", aseguró el familiar.

Sobre los hechos contaron que primero mataron a Estefany y luego a Manuel.

"Muy cerca de la casa del suegro ella estaba hablando con un hombre. Otro lo esperaba en la vía. Después la agarró y le propinó un tiro en el cuello con pistola dotada con silenciador. Luego los dos hombres llegaron hasta donde Manuel que estaba acostado en el sardinel. Le preguntaron que si había visto un tal ‘Ñoño’, y le respondió que no, cuando iba a mirar quién era le disparó. Él alcanzó a correr pero le pegó otro tiro en la cabeza", contó el familiar de Manuel.

Los homicidas se dieron a la huida, y uno de ellos botó el arma en un monte. Uno de los hijos de Manuel Márquez se dio cuenta y fue a buscar el arma, pero se llevó una sorpresa porque encontró a su cuñada muerta con un tiro en el cuello escondida sobre unas tablas.

Vecinos dijeron que todo comenzó “por un problema de envidia”, y que, en medio de ese conflicto, en la puerta de la humilde vivienda ya ellos habían plasmado una leyenda que dice "la envidia mata".

Manuel era natural de San Antero, Córdoba, y tenía 17 años de estar viviendo en Barranquilla, mientras que Estefany tenía seis meses de convivir con el hijo de Márquez Torres.

Los familiares del hombre de 43 años contaron que él se dedicaba a la venta de carbón natural y compraba sacos en ese sector.

La Policía reportó que las dos personas asesinadas tenían anotaciones judiciales. Manuel por los delitos de tráfico de estupefacientes y lesiones personales, y Estefany indiciada por tráfico de estupefacientes, extorsión y porte ilegal de armas de fuego.

Aparentemente la mujer era inducida a la venta y cobro de drogas y la pelea fue originada por problema de territorio.

Manuel Márquez Torres era padre de 7 hijos y Estefany Julieth Herrera dejó dos hijos.